Microcemento Suelos: Aplicaciones, tipos y ventajas.
Los suelos de microcemento son uno de los revestimientos continuos más extendidos en todo el mundo, ya que ofrecen posibilidades decorativas tanto para interiores como para exteriores. Este revestimiento puede aplicarse a suelos de cocinas, cuartos de baño, terrazas, etc.
¿Qué es el microcemento?
El microcemento es un revestimiento decorativo a base de cemento que se utiliza para renovar todo tipo de espacios sin grandes obras. Con un grosor inferior a 3 mm, se aplica sobre superficies existentes sin necesidad de retirar el antiguo revestimiento.
Además de su acabado estético, el microcemento es funcional. No se agrieta y es resistente al tránsito peatonal, los arañazos, el agua corriente, la luz solar y los impactos.
Ventajas del microcemento para suelos
- Los suelos de microcemento no elevan significativamente el nivel del suelo debido a su espesor mínimo de 2 a 3 mm.
- Proporciona una superficie continua sin juntas de dilatación ni uniones, lo que permite renovar todo el suelo en una sola pieza.
- Se adhiere a cualquier material sin necesidad de retirar el soporte existente, evitando escombros y pesadas reformas.
- Es resistente a los rayos UV y tiene buena resistencia térmica.
- Los suelos de microcemento ofrecen una excelente resistencia al tráfico, la abrasión y los productos de limpieza domésticos.
- Cada suelo de microcemento es único debido a la variedad de colores y acabados disponibles.
- Puede utilizarse tanto para suelos de interior como de exterior, como terrazas y alrededores de piscinas.
Cómo aplicar el microcemento: Paso a paso
- Limpia la superficie: Asegúrese de que el suelo que va a revestir con microcemento está en perfectas condiciones. Límpielo de polvo, manchas, grasa o cualquier otra partícula, y compruebe que no haya humedad en la base. Si es necesario, aplique una imprimación que bloquee la humedad.
- Aplicación de imprimación: Una vez limpia la superficie, aplique una imprimación para mejorar la adherencia entre el soporte existente y el nuevo suelo de microcemento. Utilice una imprimación adecuada a la capacidad de absorción de la superficie.
- Primera capa base: Aplique la primera capa base no pigmentada de microcemento. Utilice malla de fibra de vidrio para ayudar a minimizar las grietas con el tiempo. Tras la aplicación, lije la superficie.
- Segunda capa base: Una vez que la superficie esté completamente seca, aplique una capa base pigmentada. Elija el color deseado para el suelo continuo y, una vez cubierto, lije el suelo de microcemento.
- Dos capas de acabado: Aplicar dos capas de acabado de microcemento pigmentado. Según el acabado y la resistencia al deslizamiento deseados, utilice microcemento medio o grueso. Recomendamos dos capas de microcemento de Satine para obtener resultados óptimos.
- Protección de superficies: Por último, proteja el suelo de microcemento aplicando dos capas de un sellador previo seguidas de dos capas de un sellador superior. Esto protege, impermeabiliza y puede proporcionar un acabado antideslizante.

Colores para suelos de microcemento
El microcemento es una opción versátil que ofrece una amplia gama de colores, adaptándose a diversos estilos y ambientes. El blanco es una opción popular por su estilo minimalista, aportando sensación de amplitud y luminosidad a los espacios. Por otro lado, el gris es ideal para quienes buscan un aspecto industrial, aportando una estética moderna y elegante. Además de estos colores neutros, existe una amplia paleta que incluye tonos cálidos, fríos y terrosos, lo que permite a los usuarios personalizar su espacio según sus preferencias y el ambiente deseado.
Limpieza, cuidado y mantenimiento
Los suelos de microcemento son conocidos por su bajo mantenimiento. Para mantenerlos en condiciones óptimas, se recomienda limpiarlos de vez en cuando con agua y detergente suave. Es importante utilizar productos biodegradables especializados para conservar el aspecto del suelo y prolongar su vida útil. En zonas muy transitadas, debe utilizarse una combinación de productos específicos para garantizar un cuidado adecuado y mantener el suelo en excelentes condiciones.
Cuidado y mantenimiento
Para añadir durabilidad y brillo al microcemento, deben utilizarse ceras protectoras. La aplicación de cera sólo debe hacerse después de que el suelo esté completamente limpio y haya estado sellado durante al menos 15 días. La frecuencia del encerado dependerá del uso del suelo: en zonas de mucho tránsito, se recomienda volver a aplicar cera cada dos meses, mientras que en espacios residenciales, cada seis meses es suficiente. Esta rutina ayudará a mantener la superficie en buen estado y prolongar su vida útil.
Consejos para evitar problemas
Durante los primeros días tras la aplicación del microcemento, es fundamental garantizar una ventilación adecuada en la zona para permitir que el material se cure correctamente. Evite caminar sobre el suelo durante al menos una semana para no comprometer el acabado. Además, es importante evitar derrames y movimientos bruscos de muebles durante este periodo inicial para garantizar un acabado perfecto y duradero. Seguir estas recomendaciones ayudará a evitar problemas y a garantizar que el suelo de microcemento se mantenga en excelentes condiciones con el paso del tiempo.